Bueno, bueno, bueno, lo que se puede hacer con unas simples patatas, patatas gratinadas con ricotta, trufa y boletus. Facilísimas de hacer, más fácil imposible.
Ingredientes:
- 3 patatas
- 1 cebolla
- 200 gr. de queso ricotta
- 250 ml. de nata espesa
- pasta de trufa y boletus
- cebolla en polvo
- nuez moscada
Pelais tres patatas medianitas y las cortáis en láminas finas finas, casi transparente. Las lavamos bien y salamos en el colador. Cortamos también una cebolla en juliana muy muy fino.
En un bol, añadimos 200 gr. de ricotta, yo he utilizado la del Mercadona (os recuerdo que nadie me paga y las marcas que doy son recomendaciones).
A la ricotta he añadido 250 ml. de nata espesa, cebolla en polvo, nuez moscada y el secreto de mi éxito, tres cucharadas grandes de pate de trufa y boletus de la La Chinata (insisto que no me pagan, lo recomiendo porque me gusta) estos patés van genial en salsas blancas de nata o tipo bechamel.
Si las pruebas solas no están buenas pero en estas salsas le dan un saborazo que te mueres, yo la utilizo para croquetas de setas, o mi platazo de canelones de rabo de toro con salsa de trufa y boletus.
Mezclamos todo bien.
En una fuente ponemos un poco de salsa, una capa de patatas, un poco de cebolla y unas gotas de aceite de oliva. Y así vamos montando capas. Al final añadimos toda la salsa y cubrimos bien. Tapamos con papel film y metemos al horno a 240° durante 30 minutos. Bajamos el fuego a 200º y dejamos otros 30 minutos.
Al final deja reposar unos minutos en el horno y sin destapar el film.
Si las patatas no están cortadas finas, quizás necesites más tiempo en el horno.
Cuando estén listas solo tienes que disfrutarlas 😋, yo le añadido un poco de cebolleta seca por encima que le queda genial.