Cada vez voy descubriendo mas platos del mundo vegetariano que me sorprenden y me encantan, hoy voy a contaros uno de esos primeros platos que me dejo con la boca abierta. Hay muchas versiones de este paté, pero como casi siempre lo mas sencillo es lo mejor. Ingredientes:
– Una bandeja de champiñones.
– Un puñado de nueces.
– Una cebolla.
– Sal.
– Nuez moscada.
– Comino.
Lo primero es cortar la cebolla en cuadraditos pequeños y freír. Laminar los champiñones si no lo están ya. Cuando la cebolla empieza a dorarse añadir los champiñones hasta que se doren y salar.
En un moledor o en una picadora triturar las nueces, que queden muy muy trituradas. Las nueces trituradas es lo que le va a dar la consistencia de paté.
Añadir los champiñones con la cebolla y triturar todo junto hasta que quede muy picado, tiene que quedar como una masa. Probar de sal y corregir si fuese necesario. Añadir un poco de comino y nuez moscada rallada, le da un toque increíble.
Si al triturarlo todo junto no queda con la consistencia necesaria y encontráis que le faltaría nueces, no lo añadáis junto al paté ya hecho porque no se van a triturar bien. Sacar el paté, ponerlo en un cuenco y lavar el aparato. Triturar las nueces una vez que esté limpio y seco y añadirlo al paté poco a poco, no nos vayamos a pasar.
Espero que os animéis a probarlo, es sencillo, económico y os prometo que esta buenísimo. Elige algún pan especial, yo lo acompaño con unos panecillos con arándanos, el toque dulce le va genial.